No hace mucho tiempo hablando con un colega de profesión sobre la arqueomalacología, y después de un primer momento de comentar alguna cosa sobre la disciplina propiamente dicha, terminamos hablando sobre la vida sexual de los percebes y de los erizos de mar....
¿Realmente es necesario llegar a estos extremos para crear interés sobre esta disciplina?. Cuando pensamos en realizar análisis zooarqueológicos, en general, y arqueomalacológicos, en particular, siempre les exigimos mucho más que a otras disciplinas. Sin embargo estos estudios ya aportan una gran cantidad de información, sacándoles más rendimiento que a otros materiales de los que, pese a ser más bonitos, en muchas ocasiones están infraestudiados.
Para realizar una verdadera arqueología del XXI es necesario abandonar esas reminiscencias del coleccionismo mitológico de otros periodos, dando importancia a todos los restos, ya que si es sumamente complicada la conservación de los materiales, más complicada va a ser la reconstrucción del pasado si nosotros mismos sesgamos los depósitos. Y eso es lo que ocurre cuando se prima el estudio de unos materiales sobre otros, condenándolos, en el mejor de los casos, a un ostracismo en una caja perdida en la estantería de algún depósito de museo.
Etiquetas
Noticias
(155)
Congresos
(70)
Curiosidades
(52)
Yacimientos
(39)
Metodología
(25)
Historiografía
(21)
Identificación
(17)
¿Qué es?
(16)
Bibliografía
(15)
Intervención
(15)
Camino de Santiago
(12)
Videos
(9)
Ictioarqueología
(1)
lunes, 15 de junio de 2009
Documental moluscos
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario