Según ciertas tradiciones, algunos alimentos ayudan a estimuar el deseo sexual. Su nombre deriva de Afrodita, diosa del amor, fecundidad... en el mundo griego. La primera mención respecto al efecto estimulante de ciertos vegetales sobre el apetito sexual se remontan a unos papiros egipcios de los año 2.200 y 1.700 antes de Cristo. Desde el comienzo de la historia el hombre ha buscado alimentos mágicos para cocinarlos y así seducir a su pareja. Quizás los alimentos que mayor fama tienen como afrodisiacos son los que provienen del mar, y principalmente los moluscos. Además el consumo de estos en crudo o macerados con limón aumentarían su eficiencia.
Diversos estudios hablan que puede no ser un mito, y que moluscos como la ostra, el mejllón o almeja, contienen elementos que ayudan a generar testoterona y estrógenos.
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